Los cactus y otras suculentas son unas plantas realmente muy interesantes. Se caracterizan por acumular grandes dosis de agua en todo su tronco y hojas, hecho que hace que sean extremadamente resistentes a la falta de riego constante y a las elevadas temperaturas. Así pues, no es de extrañar que el hábitat de muchos de ellos sean zonas desérticas o con pocas precipitaciones, aun que tienen la capacidad de adaptarse a una gran variedad de ambientes y condiciones diferentes.
Estas plantas, cada vez están más presentes en nuestras casas, oficinas y terrazas, pero ¿sabemos realmente como cuidarlas? ¿Sabemos cómo actuar si enferman? Pese a que parezcan fáciles de cuidar, los cactus necesitan unos cuidados mínimos, ya que necesitan agua y también nutrientes en las épocas de mayor crecimiento. Además, los cactus pueden padecer enfermedades de varios tipos, como por ejemplo ácaros, cochinillas o nematodos, nos centraremos en estudiar los hongos que afectan a los cactus y otras suculentas y explicaremos cómo podemos realizar varios fungicidas caseros para cactus de una manera muy simple.
Hongos que afectan a los cactus
Los hongos son seres vivos inmóviles que normalmente viven en lugares húmedos y, a diferencia de los vegetales, son heterótrofos, lo que significa que no son capaces de fabricar su propio alimento, si no que se alimentan de restos de materia orgánica proveniente de otros organismos.
En este artículo, estamos buscando hongos que pertenecen a la clasificación inferior, que bien pueden ser del género Colletotrichum, Gloeosporium, Botrytis o Coniothyrium, entre otros.
Normalmente, si un cactus enferma por culpa de un hongo, presenta un síntoma llamado antracnosis o chancro, que son unas manchas irregulares de uncolor marrón, naranja y negruzco, que dan lugar a una ligera putrefacción que se expande por todo el tronco, hojas y frutos. También pueden presentar un polvillo o moho grisáceo. No se trata de una enfermedad grave, pero debe tratarse como es debido y en el tiempo adecuado. Este tipo de hongo suele afectar a los cactus en primavera y verano, ya que la humedad y las temperaturas elevadas favorecen su formación y extensión. También es posible que los cactus no muestren signos físicos de infección, pero sí tengan comportamientos extraños, como por ejemplo no crecer o hacer la floración a destiempo.
De cara a la preocupación sobre si este hongo puede infectarnos a nosotros o a nuestras mascotas, nadie debe inquietarse, ya que estos hongos son en su gran mayoría únicamente fitopatógenos, es decir, que únicamente afectan a seres vivos vegetales, a las plantas.
Así pues, lo que sí que es muy probable es que nuestros cactus infectados puedan pasar el patógeno a otros cactus que estén cercanos. Si hablamos de otras plantas, aunque no es imposible que le transmitan el hongo a tomateras, pimientos o lechugas, normalmente estos hongos son tan específicos que se suelen centrar en una familia o en un género en particular.
Los mejores fungicidas caseros para cactus y cómo usarlos
Cada día es más frecuente ver cactus u otras suculentas en nuestros hogares, en nuestras oficinas al lado de los ordenadores o bien como objeto decorativo en muchos establecimientos y tiendas. También es cierto que se ven cada vez más variedades más singulares y con una gran variedad de formas, colores y texturas. Así pues, sin sobresalir como una planta popular, el cactus ha ido haciéndose un pequeño hueco en el mercado, principalmente por ser diferente y relativamente fácil de cuidar. Pero como todo ser vivo, también hay ciertas enfermedades que los pueden afectar e incluso llegar a matarlos, y tal y como se ha explicado en el apartado anterior, un patógeno muy común que pueden tener son los hongos.
Si observamos que nuestros cactus empiezan a presentar pequeñas manchas, generalmente de un color claro que se va oscureciendo con el tiempo, podemos sospechar que les está infectando un hongo. A partir de aquí, podemos empezar a tomar ciertas medidas, intentando siempre ir de método menos agresivo al que más lo sea, más que nada para no dañar a la planta innecesariamente. Evidentemente, lo más fácil resultaría ser comprar un fungicida en cualquier establecimiento que tenga permitida su venta, pero también existen ciertos remedios caseros que pueden funcionar y que además no son tan agresivos para la planta.
A continuación, explicaremos algunos de los mejores fungicidas caseros para cactus, con materiales de uso cotidiano que tienen propiedades realmente muy interesantes.
Té de manzanilla
Esta infusión tiene elementos muy interesantes, como por ejemplo calcio, potasio y azufre (en pequeñas proporciones, evidentemente). El ingrediente más interesante como fungicida resulta ser el azufre, ya que es un componente que nos ayudará a controlar los hongos o, más bien dicho, favorecerá que no salgan. Es decir, que el té de manzanilla resulta ser más bien un método preventivo contra los hongos. Además, debe mencionarse que normalmente se utiliza con plantas de hoja más blanda como por ejemplo la tomatera, así que quizás no es lo suficientemente eficiente con el grosor del tronco o de una hoja de cactus. Aún así, es una manera poco invasiva de empezar a tratar la planta en cuestión.
Su aplicación seria mediante un rociador en spray, una o dos veces por semana. Si al cabo de un par de semanas no se notara ninguna diferencia, se recomendaría cambiar de método.
Canela en polvo
Esta especia, como ya sabemos, tiene un olor muy particular. Eso se debe a que está compuesta por unos elementos químicos volátiles muy especiales que tienen propiedades antimicrobianas. Precisamente por eso, si diluimos una cucharadita de canela en medio litro de agua, y posteriormente lo esparcimos mediante un rociador, es posible que podamos prevenir la aparición de hongos en nuestras plantas.
Bicarbonato de sodio
Este componente es realmente muy alcalino, por lo que hace que aumente el pH de la superficie de la planta y el hongo no se pueda instalar en ella. Así pues, se añadirá una cucharada sopera de bicarbonato de sodio, junto con un litro de agua, y además de añadirá un chorrito de jabón y otro de aceite para que el bicarbonato se adhiera mejor a la planta, y por lo tanto, su efecto también sea mayor. Se debe aplicar aproximadamente una vez por semana o después de cada lluvia (en función de lo que ocurra antes) y es preferible realizar esta operación cuando el Sol ya se haya puesto..
Leche o suero de leche
Este método, aunque pueda parecer extraño, es muy eficiente. Esto se debe a que la leche tiene muchos aminoácidos, y el suero de leche todavía más. Estos aminoácidos proporcionan propiedades antisépticas, que resultan ser extremadamente beneficiosas en contra de los hongos fitopatógenos (por infección del hongo mildiu sobretodo, aunque no afecte a los cactus). Así pues, si queremos probar este método antifúngico, lo que debemos hacer es depositar en un recipiente tres partes de agua por una y media de suero de leche, y rociar los cactus afectados una vez cada quince días o después de cada lluvia (lo que antes ocurra). Además, si el esparcimiento del producto en cuestión se realiza aun con luz solar, beneficia y potencia aun más las propiedades de este fungicida, ya que los aminoácidos tienen aún más poder antiséptico con el contacto de la luz del Sol.
Ajo
El ajo tiene muchas propiedades beneficiosas para el ser humano, y se ha descubierto que contra los hongos, también. Eso se debe a que tiene un gran contenido en azufre, por lo que, no nos servirá sólo como fungicida, sino también como insecticida. Así pues, debemos coger entre 5 y 10 dientes de ajo (en función del tamaño) y triturarlos junto con medio litro de agua. Posteriormente debemos dejarlo reposar aproximadamente una hora, filtrarlo, y a partir de aquí ya podremos aplicarlo rociándolo sobre el tronco y hojas de la planta en cuestión.
Cómo prevenir los hongos en los cactus
Para poder prevenir la aparición de hongos sobre los cactus, debemos principalmente regular la cantidad de agua con la que los regamos. Eso se debe principalmente a que los hongos se ven propiciados por la humedad y el calor.
Otra medida preventiva seria emplear
Los cactus y otras suculentas son unas plantas realmente muy interesantes. Se caracterizan por acumular grandes dosis de agua en todo su tronco y hojas, hecho que hace que sean extremadamente resistentes a la falta de riego constante y a las elevadas temperaturas. Así pues, no es de extrañar que el hábitat de muchos de ellos sean zonas desérticas o con pocas precipitaciones, aun que tienen la capacidad de adaptarse a una gran variedad de ambientes y condiciones diferentes.
Estas plantas, cada vez están más presentes en nuestras casas, oficinas y terrazas, pero ¿sabemos realmente como cuidarlas? ¿Sabemos cómo actuar si enferman? Pese a que parezcan fáciles de cuidar, los cactus necesitan unos cuidados mínimos, ya que necesitan agua como mínimo una vez a la semana y también nutrientes en las épocas de mayor crecimiento. Además, los cactus pueden padecer enfermedades de varios tipos, como por ejemplo ácaros, cochinillas o nematodos, nos centraremos en estudiar los hongos que afectan a los cactus y otras suculentas y explicaremos cómo podemos realizar variosfungicidas caseros para cactus y de una manera muy simple.
Hongos que afectan a los cactus
Los hongos son seres vivos inmóviles que normalmente viven en lugares húmedos y, a diferencia de los vegetales, son heterótrofos, lo que significa que no son capaces de fabricar su propio alimento, si no que se alimentan de restos de materia orgánica proveniente de otros organismos. Aproximadamente, existe un millón y medio de especies diferentes de hongos, que se pueden separar, grosso modo, en dos grupos principales, los hongos superiores y los hongos inferiores. En el primer grupo encontraríamos los Ascomicetes y Basidiomicetes, siendo los primeros saprófitos que pueden habitar en una gran variedad de ambientes (suelo, comida etc.) y los segundos las típicas setas que encontramos en la montaña.
Pero en este artículo, estamos buscando hongos que pertenecen a la clasificación inferior, que bien pueden ser del género Colletotrichum, Gloeosporium, Botrytis o Coniothyrium, entre otros.
Normalmente, si un cactus enferma por culpa de un hongo, presenta un síntoma llamado antracnosis o chancro, que son unas manchas irregulares de uncolor marrón, naranja y negruzco, que dan lugar a una ligera putrefacción que se expande por todo el tronco, hojas y frutos. También pueden presentar un polvillo o moho grisáceo. No se trata de una enfermedad grave, pero debe tratarse como es debido y en el tiempo adecuado. Este tipo de hongo suele afectar a los cactus en primavera y verano, ya que la humedad y las temperaturas elevadas favorecen su formación y extensión. También es posible que los cactus no muestren signos físicos de infección, pero sí tengan comportamientos extraños, como por ejemplo no crecer o bien hacer la floración a destiempo.
De cara a la preocupación sobre si este hongo puede infectarnos a nosotros o a nuestras mascotas, nadie debe inquietarse, ya que estos hongos son en su gran mayoría únicamente fitopatógenos, es decir, que únicamente afectan a seres vivos vegetales, o sea ser, a las plantas.
Así pues, lo que sí que es muy probable es que nuestros cactus infectados puedan pasar el patógeno a otros cactus que estén cercanos. Si hablamos de otras plantas, aunque no es imposible que le transmitan el hongo a tomateras, pimientos o lechugas, normalmente estos hongos son tan específicos que se suelen centrar en una familia o en un género en particular.
Los mejores fungicidas caseros para cactus y cómo usarlos
Cada día es más frecuente ver cactus o otras suculentas en nuestros hogares, en nuestras oficinas al lado de los ordenadores o bien como objeto decorativo en muchos establecimientos y tiendas. También es cierto que se ven cada vez más variedades más singulares y con una gran variedad de formas, colores y texturas. Así pues, sin sobresalir como una planta popular, el cactus ha ido haciéndose un pequeño hueco en el mercado, principalmente por ser diferente y relativamente fácil de cuidar. Pero como todo ser vivo, también hay ciertas enfermedades que los pueden afectar e incluso llegar a matarlos, y tal y como se ha explicado en el apartado anterior, un patógeno muy común que pueden tener son los hongos.
Si observamos que nuestros cactus empiezan a presentar pequeñas manchas, generalmente de un color claro que se va oscureciendo con el tiempo, podemos sospechar que les está infectando un hongo. A partir de aquí, podemos empezar a tomar ciertas medidas, intentando siempre ir de método menos agresivo al que más lo sea, más que nada para no dañar a la planta innecesariamente. Evidentemente, lo más fácil resultaría ser comprar un fungicida en cualquier establecimiento que tenga permitida su venta, pero también existen ciertos remedios caseros que pueden funcionar y que además no son tan agresivos para la planta.
A continuación, explicaremos algunos de los mejores fungicidas caseros para cactus, con materiales de uso cotidiano que tienen propiedades realmente muy interesantes.
Té de manzanilla
Esta infusión tiene elementos muy interesantes, como por ejemplo calcio, potasio y azufre (en pequeñas proporciones, evidentemente). El ingrediente más interesante como fungicida resulta ser el azufre, ya que es un componente que nos ayudará a controlar los hongos o, más bien dicho, favorecerá que no salgan. Es decir, que el té de manzanilla resulta ser más bien un método preventivo contra los hongos. Además, debe mencionarse que normalmente se utiliza con plantas de hoja más blanda como por ejemplo la tomatera, así que quizás no es lo suficientemente eficiente con el grosor del tronco o de una hoja de cactus. Aún así, es una manera poco invasiva de empezar a tratar la planta en cuestión.
Su aplicación seria mediante un rociador en spray, una o dos veces por semana. Si al cabo de un par de semanas no se notara ninguna diferencia, se recomendaría cambiar de método.
Canela en polvo
Esta especia, como ya sabemos, tiene un olor muy particular. Eso se debe a que está compuesta por unos elementos químicos volátiles muy especiales que tienen propiedades antimicrobianas. Precisamente por eso, si diluimos una cucharadita de canela en medio litro de agua, y posteriormente lo esparcimos mediante un rociador, es posible que podamos prevenir la aparición de hongos en nuestras plantas.
Bicarbonato de sodio
Este componente es realmente muy alcalino, por lo que hace que aumente el pH de la superficie de la planta y el hongo no se pueda instalar en ella. Así pues, se añadirá una cucharada sopera de bicarbonato de sodio, junto con un litro de agua, y además de añadirá un chorrito de jabón y otro de aceite para que el bicarbonato se adhiera mejor a la planta, y por lo tanto, su efecto también sea mayor. Se debe aplicar aproximadamente una vez por semana o después de cada lluvia (en función de lo que ocurra antes) y es preferible realizar esta operación cuando el Sol ya se haya puesto..
Leche o suero de leche
Este método, aunque pueda parecer extraño, es muy eficiente. Esto se debe a que la leche tiene muchos aminoácidos, y el suero de leche todavía más. Estos aminoácidos proporcionan propiedades antisépticas, que resultan ser extremadamente beneficiosas en contra de los hongos fitopatógenos (por infección del hongo mildiu sobretodo, aunque no afecte a los cactus). Así pues, si queremos probar este método antifúngico, lo que debemos hacer es depositar en un recipiente tres partes de agua por una y media de suero de leche, y rociar los cactus afectados una vez cada quince días o después de cada lluvia (lo que antes ocurra). Además, si el esparcimiento del producto en cuestión se realiza aun con luz solar, beneficia y potencia aun más las propiedades de este fungicida, ya que los aminoácidos tienen aún más poder antiséptico con el contacto de la luz del Sol.
Ajo
El ajo tiene muchas propiedades beneficiosas para el ser humano, y se ha descubierto que contra los hongos, también. Eso se debe a que tiene un gran contenido en azufre, por lo que, no nos servirá sólo como fungicida, sino también como insecticida. Así pues, debemos coger entre 5 y 10 dientes de ajo (en función del tamaño) y triturarlos junto con medio litro de agua. Posteriormente debemos dejarlo reposar aproximadamente una hora, filtrarlo, y a partir de aquí ya podremos aplicarlo rociándolo sobre el tronco y hojas de la planta en cuestión.
Té de cola de caballo
Este proceso se puede realizar mediante el secado de la planta de cola de caballo, también conocida como equiseto, y tras su secado completo (dependerá de las condiciones ambientales y de la estación en la que nos encontremos) podremos empezar a realizar su infusión con agua.
Existen otros métodos caseros para combatir los hongos en los cactus, como por ejemplo diluyendo una aspirina (ácido acetilsalicílico de 100mg) en un litro de agua una vez al mes. También se pueden combatir diluyendo una cucharada de vinagre en un litro de agua y rociar el cactus dos veces por semana, ya que baja el pH y crea un medio demasiado ácido para que el hongo pueda vivir. Por último, también se visto que es efectiva la dilución en agua con un poquito de lavandina (lejía), aun que debemos ser extremadamente cautelosos para no pasarnos en las cantidades y quemar la planta o matarla directamente.
En el caso de que nuestros cactus presenten antracnosis severa, lo que tendremos que hacer es retirar con la ayuda de un cúter o un instrumento afilado la parte afectada, siempre realizando un corte lo más limpio posible. A partir de aquí, procederemos a volver a enterrar el cactus en la tierra (si lleva mucho tiempo en esa tierra es preferible añadir nueva, que aporte nuevos nutrientes) y en algunos casos y en función de lo grande que sea la parte infectada que se ha retirado, algunos aficionados recomiendan untar la parte cortada con un poco de azufre.
Cómo prevenir los hongos en los cactus
Para poder prevenir la aparición de hongos sobre los cactus, debemos principalmente regular la cantidad de agua con la que los regamos. Eso se debe principalmente a que los hongos se ven propiciados por la humedad y el calor.
Otra medida preventiva seria emplear abono esterilizado para reducir el riesgo de infección, aunque estos productos suelen ser más caros. Lo que seguro que podemos hacer es mantener el cactus con una tierra nutrida o bien añadirle nutrientes de vez en cuando (en función de cada especie) para que esté lo suficientemente fuerte como para poder pasar una futura infección (ya sea por hongos, ácaros, nematodos, etc.)
Cualquier medida preventiva anterior, como el té de manzanilla o la canela el polvo, también se pueden añadir en la tierra antes de que el cactus crezca, para así intentar prevenir infecciones sobre todo en los estadios iniciales.
COMO HACER FUNGICIDA CASERO CON BICARBONATO
Los hongos son uno de los problemas más habituales que pueden afectar tanto a plantas como a personas. Aunque hoy en día existen gran cantidad de productos químicos formulados específicamente para eliminar los hongos, estos productos están desarrollados a partir de componentes muy agresivos para los seres vivos y el medio ambiente. Por ello, salvo que se trate de casos de extrema necesidad, siempre será preferible optar por productos naturales que no sean dan dañinos. Uno de los componentes que más se suele usar a la hora de elaborar fungicidas naturales es el bicarbonato de sodio, ya que, debido a sus propiedades, actúa de forma muy eficaz cuando se usa con este cometido. .
¿Qué son los fungicidas?
Se conoce con el nombre de fungicida a aquellos productos o sustancias que tienen la capacidad de eliminar o destruir los hongos, sean de la naturaleza que sea. Los hongos pueden tener formas muy diversas, desde las setas, comestibles o no, que encontramos en el campo, a organismos microscópicos. Sin embargo, en todos los casos, lo que caracteriza a estos seres vivos es que se tienen que alimentar de materia orgánica, lo que implica que terminen siendo parásitos de otros organismos.
Esto hace que podamos encontrar hongos en las plantas o en los animales y, en estos casos, será necesario eliminarlos para que no afecten a la salud de estos seres vivos. Para su eliminación, será cuando usemos los fungicidas, que serán los productos que eliminarán los hongos pero no a los seres vivos que de los que se aprovechan.
¿Por qué el bicarbonato es bueno a la hora de fabricar fungicidas?
Lo primero que hay que tener en cuenta es que el bicarbonato de sodio, o bicarbonato sódico, se utiliza en multitud de fórmulas caseras y naturales porque presenta unas características muy útiles y, al mismo tiempo, constituye una sustancia natural sin efectos negativos para los seres vivos o el medio ambiente. De hecho, el bicarbonato de sodio se usa ampliamente en la cocina en la elaboración de recetas, así como un potente antiácido natural cuando sufrimos de una mala digestión. De hecho, es precisamente por su acción antiácida, por lo que se puede usar como fungicida. Hay que tener en cuenta que, cada ser vivo, tiene un tipo de pH diferente. En este sentido, los pH ácidos serán los que vayan desde 1 a 7, mientras que los pH alcalinos serán los que vayan desde 7 a 14. Así mismo, un pH de tipo 7, será considerado como pH neutro, ya que, por su composición, no se podrá considerar ni ácido ni alcalino.
Por su naturaleza, los hongos tienen facilidad para vivir en un entorno ácido. Esto no significa que no puedan vivir en entornos con un pH superior a 7. Sin embargo, sí que se desarrollarán y crecerán mejor en un entorno alrededor de un pH en torno a 6 ó 5. Es decir, un entorno ácido.
No obstante, el bicarbonato sódico, tiene un pH natural en torno a 8. Es decir, un pH alcalino. Debido a esto, el bicarbonato sódico actúa como veneno para los hongos, así como en el caso de otros organismos cuya naturaleza sea vivir en un entorno ácido, como pueden ser los virus y las bacterias.
Debido a esto, al incorporar bicarbonato sódico en la receta de un fungicida, estaremos creando una receta alcalina que favorezca la eliminación de los hongos.
¿Cómo hacer fungicida casero con bicarbonato?
Para preparar un fungicida casero a partir de bicarbonato de sodio vamos a necesitar únicamente tres ingredientes:
- Bicarbonato sódico
- Jabón natural neutro
- Agua
Las proporciones de las cantidades de este fungicida dependerán del tipo de hongo que queramos eliminar. No obstante, por lo general, se puede considerar que mezclar:
- Una cucharada pequeña de bicarbonato sódico.
- Una cucharada pequeña de jabón natural neutro.
- Un litro de agua.
Con esta mezcla, una vez que todos los ingredientes se hayan disuelto correctamente en el agua, podremos pulverizar las plantas de interior y exterior que presenten hongos que queramos eliminar.
Por otra parte, en el caso de que los hongos que queramos eliminar estén en la tierra en lugar de las hojas o el tallo de la planta, podremosfumigar directamente esta mezcla sobre la tierra, lo que permitirá que penetre en el interior e, incluso, llegue a las raíces. En ocasiones, las plantas pueden enfermar debido a que los hongos estén atacando directamente las raíces. Gracias a esta fórmula, podremos eliminar el hongo incluso de las raíces al alcalinizar la tierra e impedir que el hongo se desarrolló.
Uno de los aspectos que tenemos que tener en cuenta a la hora de hacer este fungicida natural es que es muy importante que el jabón sea natural y neutro. De este modo, podremos estar seguros de que no se trata de un jabón que vaya a dar las plantas y, además, de que el pH inicial no contrarrestará el efecto del bicarbonato de sodio.